Los caracteres chinos son mucho más que simples trazos. Encierran una lógica intrínseca que, al ser descifrada, ofrece una comprensión más profunda no solo del idioma sino también de la cultura que representa. Pero, ¿sabías que su estructura visual también puede ser una herramienta poderosa para el desarrollo cognitivo?

A raíz de esta idea, la Fundación Qili Fundazioa ha trenzado una alianza con el Instituto Confucio de Madrid y el Centro de Educación Especial El Molino para poner en marcha una iniciativa pionera y única en España: acercar una parte de la cultura y la lengua china a los alumnos del centro de educación especial El Molino y, al mismo tiempo, aprovechar las múltiples ventajas que tiene el aprendizaje de caracteres chinos.

La escritura china no es solo un medio de comunicación. Su estructura visual, además, es muy útil para trabajar distintas habilidades cognitivas del alumnado y contribuir al trabajo de destrezas motoras. Como resultado, lograr dominar la escritura de caracteres chinos puede convertirse en una herramienta para elevar la autoestima de los y las alumnas. 

Pamplona, gracias al espacio que ofrece el centro El Molino, ha tenido la oportunidad de poner en marcha esta experiencia piloto, una experiencia única, que fomenta así inclusión social y acerca la cultura y la lengua china a personas con discapacidad intelectual. El curso ha sido impartido por Irene Izarra, traductora y docente de chino mandarin y coordinadora de programas dentro de Fundación Qili Fundazioa.

ORGANIZADORES